11 de junio de 2016

cuento de junio

EL OFICIO

de Maísa Marbán



Ilustración de Tamara Mendaza

La azotea parecía una encía desdentada con sus oquedades para el tinte recalentadas bajo el sol abrasador. Hassan el curtidor, con el espinazo doblado por el continuado esfuerzo, faenaba de un tono a otro, tiñendo el cuero animal de colores que nombraba con rigurosa precisión: rojos palpitantes; amarillos encendidos; añiles océano; verdes hierba... Su propia piel también estaba teñida.
La sorpresa llegó al amanecer, cuando Hassan, sumido en un sueño sudoroso e intranquilo, despertó bruscamente y contempló atónito, cómo en su antebrazo izquierdo germinaba una planta desconocida; en las venas de su pierna derecha un diminuto banco de pececillos nadaba organizado a contra corriente; en su pecho se agolpaba una constelación de estrellas que titilaban con suavidad, y en los muslos latían sendos corazones. El curtidor cerró los ojos convencido de que con la llegada del alba aquel sueño imposible se desvanecería como el vapor del té caliente.


MAÍSA MARBÁN
Contadora de historias. Es de León, una tierra donde el frío del invierno se combate, todavía hoy, bailando, cantando y contando. Por eso escogió la palabra y los cuentos para recorrer el camino de la vida y, por eso, su oficio desde hace muchos años es contar para conjurar la alegría.

Si quieres saber más de ella entra en su web.


TAMARA MENDAZA
Tamara se enamoró del dibujo desde pequeña, dibujaba para desconectar del mundo. Se enredó en dibujo y el dibujo se enredó a ella, y de ahí al arte, y del arte al diseño de moda. Ilustrar para ella es otra manera de contar historias en la que se siente cómoda. Y así es posible encontrar a Tamara enfundada en un mono de trabajo bailando los materiales, cantando las formas, o con una falda y una blusa a cuadros bailando swing.


Si quieres saber más sobre él entra en este enlace