CROISSANT
de Manuel Castaño
Ilustración de Kike Castaño
Se enamoraron allí mismo, en el horno, entre
harinas, varillas de mezclar, natas montadas y azúcares. Se enamoraron nada más
conocerse, cuando los dos eran aprendices. Se enamoraron como solo la levadura
sabe enamorarse del agua, la harina y la sal. Para siempre.
Se enamoraron tanto que no podían vivir el
uno sin el otro. Por eso un día él se pinceló el cuerpo de mantequilla y se
rebozó en harina mientras que ella se desnudaba, se tumbaba en la mesa de
amasar y abría sus muslos para recibirle a él. Y él entró en aquel horno nuevo,
y llegó al vientre, y arqueó su cuerpo esperando que ella le diera calor. Y
ella excitada y plena subió la temperatura de su útero. Y así hicieron el amor
por última vez y para siempre.
MANUEL CASTAÑO
O Manuel Légolas como también gusta llamarse en esto de los
cuentos. Colecciona Caperucitas, tiene un hijo que dice que es su única historia con final feliz, y ahora le ha crecido la barba. Es cosa extraña, dice. Un día
dejó de afeitarse y los pelos que hace años se escondieron bajo su calva ahora
afloran en su cara.
Si quieres saber más sobre él entra en este enlace.
KIKE CASTAÑO
Trabajo en Indira Madrid como diseñador gráfico y
es licenciado en Bellas Artes y graduado en gráfica publicitaria. Su gran
pasión es la ilustración editorial y ya ha podido soñar despierto con alguna
pequeña publicación. Es fan de ilustradores clásicos de cuentos como John Bauer
o Arthur Rackham pero sobre todo es fan de dejarme llevar en el torbellino de
la imaginación y seguir siendo un niño grande.
Si quieres saber más sobre él entra en su web.
No hay comentarios:
Publicar un comentario