6 de octubre de 2008

CUENTO

LA HISTORIA ATRAPADA
jab, octubre 2008

En las fotos de Praga de mi compañero de piso, junto a la estatua de Santa Ana en el Puente de Carlos vi un rostro familiar. Ya en casa comprobé que en las fotos que yo saqué un año antes en ese puente aparecía el mismo rostro. Una joven miraba hacía el castillo en ambas fotos, sola, vestida con un gabán gris, despertando nostalgia, presa del pasado. Ahora sé que ambas fotos participan de un rito desconocido, una historia vedada en cientos de imágenes.
Ella espera lo que no sucederá. Somos testigos llenos de ternura.




















jab prefiere mantenerse en un discreto segundo plano, prefiere que disfrutéis de la historia. Está entre la gente haciendo la ola, donde se encuentra como pez en el agua.

1 comentario:

Atrapalabras dijo...

Escrito por Irene (Valencia):
Mi marido, mi hija y yo visitábamos a unos amigos en Alcalá de Henares. Y en la cola del supermercado, buscando la cartera en el bolso para pagar la compra del fin de semana…encontré mi primera historia atrapada. La primera reacción fue de sorpresa, la segunda pregunté a mi marido si era suya, si él la había dejado en mi bolso. Me dijo que no. Pensé que la tarjeta habría sido cosa suya, le habría llamado la atención por alguna razón y la guardó en mi bolso porque le interesaba. Le pregunté de nuevo. Otra respuesta negativa. Lo tercero que hice fue leerla. Me gustó. La guardé. Aunque sin dejar de preguntar de vez en cuando si era una broma, qué significado tenía…
Allí ha permanecido la tarjeta, en mi bolso todo el fin de semana. Hasta hoy que hemos vuelto a Valencia. Me he conectado a internet y habéis aparecido vosotros. Suena interesante. ¿Formo parte de una gran cantidad de tarjetas repartidas por todo Alcalá de Henares? ¿O es que el cartero vio en mí un potencial? Sea como sea me parece una idea atractiva. Mañana mismo de camino al trabajo depositaré mi tarjeta en alguien o en algún lugar de Valencia. Es una pena no poder quedármela. Y que gire el mundo.